HISTORIAS

EL SUPREMO

No tengo palabras ante tal ser, creador de todo lo visible e invisible como dice el credo del cristianismo.
Supremo para algunos, y para otros, un mito. Sin embargo aquellos que no crean en el, no importa, pueden perder su fe por alguna catástrofe o caso, lo verdaderamente importante, es que nuestro señor cree verdaderamente en ellos.
No puedo verdaderamente explicar, tanto amor que siento por mi creador, por aquel que me da poder y cariño, por aquel que me da a mis hermanos y padres u abuelos.
Amigos míos, verdaderamente lo escucho hablar conmigo, en el interior de mi corazón, e incluso ahora cuando escribo de el en estos párrafos, se que mi amantísimo supremo y padre celestial esta a mi lado.

Dios de luz, protector de tinieblas, y a la vez, servidor de sus hijos, ante incansables peticiones a gritos y llantos, el recurre a todos, aunque muchas veces nos lo preguntemos, ¿ donde esta? , el siempre esta ahí, aunque no lo veamos,
¿ que padre por malo que sea no escucharía a sus hijos estando en el borde de la tragedia? . Ninguno.

Mi corazón salta de gozo, al ver las tantísimas maravillas que a hecho el padre todo poderoso, su obra cumbre como la mayoría dice, el ser humano, sin embargo, todo lo que a creado, es tan maravilloso, que ninguna pisa a otra en ningún aspecto, por ejemplo la naturaleza, padre mío, que cumbre de creación tan maravillosa, sus verdes prados y altos árboles con frondosas copas, que albergan familias de pájaros que alzan sus alas al viento para lucir sus preciosas plumas que en un día tu les diste.

Tu, padre mío, que bajaste de los cielos para reencarnarte en tu hijo Jesús y librarnos a todos del terrible infierno, y no padecer bajo el poder de Satanás y sus malditos diablos.

Muchas veces me haces recordar, el dolor, sufrimiento y humillación que pasaste en tu camino hacia el calvario, la humanidad no es digna de eso, sin embargo tu, padre mío, lo hiciste, por todos nosotros, como te podremos devolver el favor, de que manera, aun así siento en este instante que me hablas en mi corazón y me dices, que seamos justos, buenos y propaguemos la paz por donde pasemos.

Padre mío, la cruz donde padeció tu hijo Jesús por todos nosotros, símbolo actual de la iglesia y del cristianismo, para mi tenerla día a día donde yo me ambiente es como estar en los cielos de saber en todo instante de que estas con nosotros.

Hoy por hoy, la gente va perdiendo mas la fe en ti padre mío, sin embargo tienen una cualidad general muy buena, son nobles y buenos, que son cualidades que tu deseas para los tuyos.

Mi fe nunca se apaga, soy servidor de mis hermanos en todos los aspectos que pueda dar, sin embargo yo los amo mas que a mi mismo, por que en cada uno de ellos te veo reflejado señor, siempre defenderé tu palabra, siempre llevo la cruz como mi símbolo, Jesucristo, símbolo de amor y fe, las alegrías, causas de tu mano celestial, y el amor, la cosa mas bella del mundo, gracias señor, por dejarme ser uno de tus tantos servidores y estar contigo asta el fin del mundo, me diste el don de la magia y del poder y los defenderé con la mejor arma que nos enseñaste bien, LA FE

RELATO DE UN ALMA INTRANQUILA

A continuacion, leereis una historia contada por una persona a la que admiro grandiosamente y que quiero en el fondo de mi alma; es la esposa de mi hermano Jose Manuel; Dolores Matutano Garcia:

Erase una vez... Bueno así no empiezan estas historias. Verán era una de esas épocas en las que todo te sale mal, o parece que así sea.
Mi madre por ese entonces se encontraba en el hospital muriéndose. Sí, tal como suena, aunque sea muy crudo decirlo.
Por aquel entonces, mi vida amorosa no dejaba nada que desear. O sea, una de esas épocas en las que todo te va más que mal.
Me sentía baja de forma, como si alguien en algún momento pudiera apoderarse de mí.
Una tarde al ir a dormir la siesta, nunca en la cama pues estaba sola; me tumbé en el sofá. Por cierto incomodísimo.
Llegado un momento de la tarde y después de varias pesadillas, sentí como algo o alguien me empujaba hacia dentro de los muelles del colchón. Algo inexplicable, pues parecía que estaba penetrando en mi cuerpo, de una forma aplastante. Sintiendo un calambre extraño.
Desperté de un sobresalto respirando agitadamente y pensando, que algo raro había pasado.
Aunque no se lo crean, yo tengo ciertas intuiciones para notar ciertas presencias.
Quise hacerme la ignorante, pero algo dentro de mí, me decía que yo ya no era la misma, que algo había cambiado.
Incrédula y sin querer darme cuenta que yo sabía lo que estaba pasando, ignoré lo sucedido.
Sin embargo sentí miedo, pavor, sabía que en realidad algún ser se había apoderado de mí. Pero no quería creerlo.
¿Saben aquello que uno sabe a ciencia cierta y no quiere creer?. Pues, eso mismo me pasaba a mí en ese momento.
Respiré profundamente intentando creer que nada pasaba, pero era inevitable algo dentro de mí surgía y no era yo. Lo sabía desde el principio.
Aquel día cambió mi vida. Desde aquel momento, yo me convertí en una persona irreconocible. Mal carácter, malas ideas, malas intenciones y sobre todo mala en general.
Sólo pensaba en cómo hacer daño, en vez de cómo perdonar. En cómo comerme el mundo, en vez de dejar que las puertas del mundo se me abrieran. En una sencilla palabra, en cómo joder al prójimo, en vez de dejar que me ayudaran.
Yo no era yo. Mi vida tampoco. Parecía que aunque no quisiera los hilos de un a marioneta me manejaran.
Nunca me había dado cuenta de ello, hasta que un día sin saber cómo hice unos cursillos de Reiki ( para quien no sepa lo que es, es un traspaso de energías Universales de un cuerpo a otro, mientras tú eres el intermediario. Gracias a Lola Rodríguez Álvarez).
En ese curso hubo un momento en el que todos tus compañeros, te daban una sesión. Mientras tú estabas relajada y tumbada.
Hubo un instante de mi sesión, en la que vi como un hombre corpulento y enorme salía de mi cuerpo. No sabía en aquel instante lo que significaba. Hasta que después de consultarlo con mi Maestra, Lola; me explicó lo que había sucedido dentro de mí. Estaba protegida y todo aquel que quisiera hacerme daño se alejaba de mí.
Pero claro ahora ya no tengo miedo a nada de ese tipo. Porque desde entonces estoy protegida por mi Ángel de la guarda, por mis Guías espirituales y como cada una quiera llamarle, por Dios que desde ese mismo instante comencé a sentir que estaba dentro de mí; aunque hasta entonces no me había dado cuenta.
Le doy las GRACIAS a Dios, el universo; como queráis llamarle. A mi Ángel de la guarda, a mis Guías espirituales y a todo aquel que lea este relato y lo crea. GRACIAS.
Sé que ahora estoy protegida y siempre lo estaré.

Gracias a ti, Moisés Viretti (nombre bíblico y con mucha fuerza), que me lo publicas en tu página web. Y a todos las almas, ángeles, guías...etc.; que estáis con nosotros; aunque haya personas que no os sientan. Pero estáis ahí, ayudando en lo que podéis y apoyándonos en lo ardua que es la vida.
Aún puedo contaros más cosas.
Si queréis contactad conmigo podéis hacerlo en [e-mail].
Gracias de nuevo. Buena suerte y que en lo que creáis os bendiga. Besos.

Sorprendente verdad,gracias Lola por tu colaboracion y envia siempre que quieras todas tus historias inquietantes y paranormales,lo mismo os digo a vosotros, si quereis contar que vuestro articulo sobre lo paranormal se publique en mi pagina, mandalo a traves de correo electronico,[e-mail], gracias.